Las puertas seccionales se han convertido, en los últimos años, en una de las soluciones más populares para cerrar un garaje. Si estás buscando un puerta para tu casa, te lo contamos todo sobre un sistema que no te va a dejar indiferente.
Para que puedas hacerte una idea de las prestaciones de este tipo de puertas, veamos como se comportan frente a los siguientes conceptos.
ESPACIO
El ahorro de espacio es, sin duda, la mayor de las ventajas que ofrecen las seccionales. Gracias a su sistema de apertura y cierre vertical, podrás disfrutar de todo el garaje. Las puertas se fabrican a medida y el único requisito es disponer de un techo, ya que el mecanismo se encuentra en él.
ENERGÍA
Este tipo de puertas te aseguran un cierre prácticamente hermético. Si cuentas con una vivienda donde garaje y zonas habitables están conectadas, conservarás la temperatura de manera homogénea y sin perdidas.
COMODIDAD
Las puertas seccionales pueden ser manuales o automáticas. En los últimos tiempos los precios se han vuelto bastante competitivos, por lo que podrás ganar en comodidad si automatizas tu puerta.
ESTÉTICA
Las puertas constituyen el primer impacto visual cuando visitamos una vivienda. Es importante poder adaptar la puerta de nuestro garaje al estilo de la casa y su entorno. Desde estética lisa, acanaladas, en blanco o imitación madera, las puertas seccionales ofrecen un sin fin de posibilidades.
CALIDAD
Siempre que vayas a adquirir una puerta has de tener presente la calidad de la misma. Por ello, has de fijarte bien que tu puerta, ya sea seccional o no, cuente con el marcado CE. Este distintivo es elaborado por las instituciones europeas como certificado de que la puerta cumple con todas las normas de seguridad y calidad.
Las puertas seccionales pueden ser realizadas en diferentes materiales, cada uno de ellos con sus ventajas e inconvenientes. Vamos a hacer un repaso a los principales materiales con los que se fabrican.
PVC
El PVC es un material que cuenta con dos grandes ventajas: es muy económico y tiene una buena capacidad aislante. Sin embargo, está en desuso en los últimos años. Al ser bastante blando, lo convierte en un material inapropiado para puertas de gran envergadura. Además, no ofrece una buena resistencia al roce, lo que hace que se deteriore con facilidad.
MADERA
La madera, pese a no ser el material más económicos, es ampliamente deseado por los clientes. Ofrece un acabado estético increíble y es además un gran material aislante. Sin embargo, necesita un mantenimiento constante y caro, ya que la madera y las inclemencias climáticas no son buenas amigas. Necesitarás, de manera periódica, aplicar tratamientos antihumedad, entre otros.
ACERO
Las puertas seccionales de acero se componen de una lámina de este material, la cual es reforzada por unas barras para ofrecer resistencia y rigidez. Si instalas este tipo de puertas ganarás en ligereza, además de ser un material económico. Sin embargo, esperemos que no vivas en lugares de climatología algo extrema, pues las puertas seccionales de acero no ayudan al aislamiento del lugar.
ALUMINIO
Si dejamos a un lado el aspecto económico y que es un material más endeble, el aluminio es perfecto para tu puerta seccional. Gracias a su resistencia ante las inclemencias meteorológicas, no requiere un mantenimiento constante. Además, el aluminio es altamente personalizable, pudiendo ser adaptado a cualquier estilo. Si buscas que tu puerta sea un gran elemento aislante, existen modelos con doble lámina de aluminio que se rellena de espuma, reforzando la puerta y ayudando a lograr un gran aislamiento térmico y acústico.
Sin duda las puertas seccionales son la mezcla perfecta entre estética y eficacia. Si tienes cualquier duda, en Powermatic te
asesoramos en lo que necesites.